Autosuficiencia energética: Electricidad

Como hemos explicado anteriormente, la finca ya existía antes de iniciar el proyecto y, por tanto, parte del equipamiento eléctrico estaba ya instalado. A la hora de dimensionar un sistema de energía eléctrica autónomo es tan importante el conocimiento de la carga a alimentar en cuanto a su naturaleza (resistiva, reactiva, etc. así como los valores promedio y el factor de pico de la potencia consumida.

Entrando ya en detalle en la instalación efectuada, el esquema eléctrico del sistema se puede apreciar en esta imagen. Está formado por tres filas de placas, cada una trabajando a un máximo de 150V para mejorar el rendimiento, al trabajar a alta tensión y corriente más reducida.

En el diagrama siguiente puede observarse la estructura de cada una de las filas de captadores. El conjunto se ha optimizado para la captacón en invierno, ya que es el momento de mínima insolación (por tiempo y por ángulo).

En esta imagen podemos ver el proceso de construcción de las soleras para las tres filas de placas.

Aquí podemos ver el recinto de las placas con sólo las soleras.

Y aquí tenemos otra vista...

Una vez terminado el recinto y cumplidos todos los requisitos de seguridad (alarma, detectores de proximidad) y con el seguro en regla, se montan las placas, que aquí vemos en detalle.

Finalmente este es el aspecto que presenta el campo de paneles solares: Una vez terminado el recinto y cumplidos todos los requisitos de seguridad

Entrando ya en el conjunto de equipos que constituyen el sistema completo, podemos ver, en primer lugar, los reguladores solares.

A continuación se pueden observar los tres inversores. Son necesarios tres pues la finca usaba una trifásica como corriente de entrada. Por cierto, parte del problema en la puesta en marcha fue que la finca se servía de una trifásica de 230VAC (la tensión entre fases) cuando lo habitual hoy en día es el uso de las redes trifásicas de 400VAC.